En este volumen se recogen numerosas experiencias educativas realizadas en escuelas infantiles municipales de Reggio Emilia (Italia). Proyectos y actividades nacidos del interés de un conjunto de profesoras y profesores que conviven con niños y niñas en las aulas, y que disfrutan escuchando, conversando e investigando con ellos. En esta modalidad de escuelas se ponen a prueba: la fecundidad de ideas, el trabajo reflexivo y en equipo, la intuición y sensibilidad de un colectivo docente que intenta conectar de manera coherente fines y recursos, las ideas con los hechos, la fantasía con la razón. Estamos ante un «manifiesto de didáctica» para una etapa tan decisiva como es la educación infantil. Los proyectos que reflejan estas experiencias asumen una concepción pedagógica en la que desempeña un papel primordial la figura del profesor-investigador en las aulas; algo que resulta imprescindible para poder moverse en un espacio donde son consustanciales categorías conceptuales como: libertad, complejidad, pluridimensionalidad, contingencia, imprevisibilidad, etc. Las escuelas infantiles aquí reflejadas se configuran como una comunidad educativa en la que «nos educamos» más que «se educa», en la que todos los sujetos implicados (niños y niñas, el equipo docente, las familias) son a la vez educadores y educandos, y donde la inteligencia, los conocimientos y habilidades, la curiosidad, los sentimientos y la fantasía de cada uno son interdependientes de los del resto del colectivo.